La experiencia de manejar un Alfa Romeo 4C
A la hora de elegir un automóvil hay decenas de marcas y cientos de posibilidades disponibles. Sin embargo, cuando lo que se buscan son experiencias únicas al volante la lista se reduce a muy pocas marcas.
Sin dudas, Alfa Romeo es una de ellas. Y si manejar un Alfa es una experiencia distinta, ligada a las emociones y la deportividad, estar al mando de un 4C puede superar todo lo imaginable.
Y lo que verdaderamente vale no es lo que se puede anunciar desde una campaña publicitaria sino lo que los mismos propietarios cuentan sobre sus experiencias. Así lo testimonian cuatro usuarios, de Europa (Italia, Francia, Alemania e Inglaterra), quienes no dejan dudas de que manejar un 4C brinda una sensación inigualable. Cuatro usuarios, cuatro países dentro de un mismo continente que se unen en la emoción de manejar una maquina con Cuore Sportivo.
Emoción, belleza, deportividad, velocidad, ligereza, mística y, claro, el rugido único de un Alfa, son los comunes denominadores que aparecen en el relato de estos cuatro propietarios (Piero, Alain, Detlev y John). Piero afirma que jamás olvidará los primeros kilómetros que estuvo al mando del 4C mientas que John concluye que el 4C es un auto del que jamás podrá separarse.
Esas experiencias inigualables son posibles gracias a su motor central de 240 CV de potencia máxima, un chasis deportivo de fibra de carbono, tracción trasera y menos de 900 kg de peso, lo que lo otorga una relación peso/potencia extraordinaria. Supera sin problemas los 255 km/h y acelera de 0 a 100 m/h en 4,5 segundos.
¿Quiénes será los argentinos que se sumarán al selectísimo grupo de propietarios de un 4C y que podrán vivir experiencias únicas de manejo? Para saberlo, habrá que esperar solo un poco más. Por el momento podemos empezar a soñar y disfrutar del testimonio de Piero, Alain, Detlev y John con sus 4C.